La Real Academia Española (RAE) ha puesto nuevamente sobre la mesa la importancia de cuidar la ortografía en el uso cotidiano del idioma, al precisar las normas para el empleo del prefijo “ex-”. Aunque parezcan minucias, estos lineamientos tienen implicaciones relevantes en la claridad del mensaje y en la percepción de profesionalismo de quien escribe. La actualización normativa confirma que la escritura correcta no es un detalle menor, sino un pilar de la comunicación eficaz.
En un contexto donde la rapidez de la información rivaliza continuamente con la precisión, la correcta ortografía sigue siendo un símbolo de seriedad. Esto lo evidencia el reciente recordatorio por parte de la RAE acerca del uso adecuado del prefijo «ex-«, un término que, aunque habitual, frecuentemente se utiliza de forma errónea incluso en medios periodísticos y ámbitos profesionales.
La regla ortográfica y su uso en la práctica
Según la Ortografía de la lengua española, el prefijo “ex-” debe escribirse unido a la palabra que modifica, sin guion ni espacio intermedios. Por ejemplo: exministra, exreportera, exactor. La tendencia a separar el prefijo con un espacio —como en “ex esposa” o “ex abogado”— contradice la norma vigente, que establece que lo correcto es: exesposa, exabogado.
No obstante, hay algunas circunstancias en las que el uso del guion es permitido. Esto sucede cuando la palabra que sigue al prefijo empieza con una letra mayúscula, como en ex-UNICEF, o cuando se debe evitar confusión, como en ex-director (refiriéndose a alguien que ejerció el cargo), para distinguirlo de «expreso» (hablando del tren o del café). Además, se admite la separación cuando el prefijo modifica a una expresión compuesta que se considera indivisible, como en «ex jefe de estado» o «ex líder mundial».
Además, la RAE sugiere no colocar «ex-» delante de sustantivos que se refieren a objetos o adjetivos, como en «república exsoviética» o «exhuracán». En estas situaciones, es preferible utilizar expresiones como «antigua república soviética» o «el antiguo huracán».
Un elemento fascinante es el empleo del prefijo al referirse a individuos con quienes se tuvo un vínculo amoroso. En oraciones como «Mi ex me contactó por la mañana», el vocablo «ex» funciona como sustantivo y no cambia en plural, sin necesidad de comillas, cursivas o acento: «Es amiga de todos sus ex».
Ortografía como reflejo de profesionalismo
Aparte del aspecto gramatical, escribir correctamente transmite una impresión de competencia y responsabilidad. En contextos donde la comunicación escrita es esencial —ya sea en medios de comunicación, ambientes académicos o laborales—, el uso preciso del lenguaje aumenta la confianza y credibilidad del comunicador. En cambio, los errores ortográficos y de construcción gramatical suelen vincularse con la falta de preparación o apatía.
La RAE, entendiendo esta situación, sigue comprometida con la renovación de las normas sin dejar de lado las demandas cambiantes de los hablantes. En 2020, presentó el Observatorio de Palabras, una plataforma digital que agrupa términos en continuo cambio —como neologismos, extranjerismos, tecnicismos y regionalismos—, que aún no están incluidos en el Diccionario de la Lengua Española pero que crean dudas comunes entre los usuarios. Esta base de datos, aunque temporal, muestra la naturaleza dinámica del idioma y el deseo institucional de apoyar su evolución.
Una entidad con más de 300 años de trayectoria
Fundada en 1713 en Madrid por iniciativa del marqués de Villena, la Real Academia Española ha sido un pilar en la regulación del idioma, manteniendo la unidad del español a lo largo de su expansión geográfica. Desde su integración en la Asociación de Academias de la Lengua Española (ASALE) en 1951, colabora estrechamente con las 22 academias de América y Filipinas para asegurar una política lingüística común.
La institución, compuesta por 46 académicos, tiene como misión velar por el buen uso del idioma sin imponer barreras al desarrollo natural de la lengua. Este equilibrio entre norma y evolución ha sido clave para mantener la cohesión del español en todo el mundo hispanohablante.
Precisión lingüística en tiempos de inmediatez
En una sociedad dominada por la rapidez, donde los mensajes se generan y se absorben velozmente, la correcta escritura continúa siendo esencial para garantizar una comunicación precisa, efectiva y profesional. La exhortación de la RAE respecto al empleo de «ex-» es más que una simple precisión gramatical; es un recordatorio de que la atención al lenguaje demuestra respeto hacia los demás y un compromiso con la excelencia.
Este estilo de guías no solo promueve la consistencia en el idioma, sino que también educa y beneficia a quienes lo hablan. En resumen, enfocar los detalles lingüísticos no solo perfecciona los escritos: también potencia la reputación de sus autores.